La fotografía ayuda al olvido. (...) El rostro fijo y plano de un muerto (...), al alcance de la mano, nunca es otra cosa que una imagen ante el millón de imágenes de las que disponemos en la cabeza. Y la película del millón de imágenes siempre será la misma película. Eso confirma la muerte.
Marguerite Duras
(en LA VIDA MATERIAL. Traducción de Menene Gras Balaguer. Alianza editorial.)