miércoles, 31 de julio de 2019

'LOS OJOS VERDES', DE MARGUERITE DURAS. FRAGMENTO.



La nieta de una mujer que tuvo en el pasado remoto cierta amistad con Marguerite Duras le escribe a esta una carta invitándola a la charla que dará su abuela, de 89 años, en la residencia de ancianos donde vive. La escritora no le responde y recibe al cabo una carta de la anciana:

Señora:

Tiene usted razón al permanecer silenciosa. A través de la joven que yo fui, su fantasía ha creado una imagen ficticia que conserva su encanto precisamente gracias a este anonimato misterioso que hay que preservar. Yo misma (...) no quise leer su libro ni ver su película. Discreciones de recuerdos, de impresiones, que conservan su valor quedándose en la sombra, en la conciencia de lo real hecho irreal.

Con mis mejores deseos.

(en LOS OJOS VERDES. Marguerite Duras. Ediciones Paradigma. Traducción de Chantal Delmas.)